España sigue invirtiendo en guerras y armas mientras aumentan los recortes sociales y el desempleo afecta ya a casi 5 millones de personas en todo el territorio estatal [1], además de que alrededor de un millón y medio de familias no tienen ningún tipo de ingresos con el que sobrevivir día a día [2].
En paralelo a esta crisis social, el Estado español no tiene cuantificado el gasto que conllevará su intervención en Libia aunque, por otro lado, James Stavridis -comandante del Cuartel General Supremo de la OTAN en Europa- ya advirtió que la “operación” supondrá cientos de millones de dólares para la coalición militar [3]. En cualquier caso supondrá un implemento a los presupuestos militares y de control social españoles, que según el Centre Delàs ascendían el año pasado a 23.115 millones de euros sobre un presupuesto general del Estado de 185.249 millones de euros [4].
Por otro lado, cuando los países integrados en la organización armada OTAN intervienen en diversas guerras y conflictos armados, nuestros políticos siempre hablan de paz, democracia y de intervenciones humanitarias. Pues bien, en nombre de todo ello la OTAN causó en 2010, sólo en Afganistán, la muerte de más de 2.700 civiles [5]. Ahora para Libia se vuelve a hablar de humanitarismo, de paz, de instaurar la democracia… mientras se sigue olvidando, por ejemplo, las situaciones de Bahrein, Siria, Guinea Ecuatorial, Palestina, el Sahara Occidental, etc.; por eso nuevamente nos preguntamos a cuento de qué bombardear un país como Libia y armar a los rebeldes para respaldar una guerra civil en toda regla con la que conseguir un gobierno títere y en donde España contribuye a esta situación tanto desde el mar como desde el aire [6], con el agravante de que las propias fuerzas militares libias están usando armas españolas, como las bombas de racimo que se les vendió entre 2007 y 2008 [7]. Se habla de paz, pero se masacra a los civiles de ambos bandos e incluso las razzias internas y el intervencionismo de la coalición armada está provocando el éxodo masivo [8]. Pero no sólo las víctimas o los más afectados son personas de los países agredidos: según datos publicados por una revista estadounidense, los jóvenes que regresaron de guerras como la de Irak cometían todo tipo de actos delictivos, incluyendo un 20% más de asesinatos y homicidios que el resto de la población de su edad; además en 2010 se reveló que el número de suicidios de miembros de las fuerzas armadas estadounidenses –tanto veteranos como miembros en activo- superaba en tres veces al número de caídos en combate entre las guerras de Irak y Afganistán [9].
Todo ello nos reafirma en seguir considerando una sinrazón la guerra, el armamentismo y las políticas belicistas –que a veces se parapetan tras la palabra “paz”-. Por todo eso, y antes de guardar un minuto de silencio, volvemos a repetir nuestro lema una vez más: ¡Parad la guerra!
Albacete, a 1 de mayo de 2011.
NOTAS:
[1] http://www.diagonalperiodico.net/Un-durisimo-recorte-privatizador.html y http://www.elmundo.es/elmundo/2011/04/29/economia/1304060650.html
[2] http://www.xornal.com/artigo/2011/04/30/economia/cerca-millon-medio-familias-no-tienen-ningun-ingreso/2011043000162201906.html
[3] http://www.cincodias.com/articulo/economia/Hacienda-ha-cuantificado-gasto-militar-espanol-Libia/20110329cdscdseco_8/ y http://www.cincodias.com/articulo/economia/operacion-Libia-costara-cientos-millones/20110329cdscdseco_13/
[4] http://www.nodo50.org/antimilitaristas/spip.php?article4469
[5]http://www.asiared.com/es/notices/2011/03/2010__nuevo_record_de_muertes_de_civiles_en_afganistan_1380.php
[6] http://www.expansion.com/2011/03/18/portada/1300455654.html
[7] http://www.greenpeace.org/espana/es/Blog/bombas-de-racimo-espaolas-en-libia/blog/34291
[8] http://www.20minutos.es/noticia/1035652/0/inmigrantes/libia/lampedusa/
[9] http://www.nodo50.org/tortuga/Victimas-de-la-guerra